07/03/2014 7:39:00
Eric Solar le contó al diario Hoyxhoy que con Alejandra Avendaño prefirieron no manejar y tomar un taxi para devolverse de su fiesta de matrimonio en el Club Hípico, en Santiago. Pese a las precauciones, otro auto los impactó. El chofer ya había sido condenado por conducción en estado de ebriedad, sin embargo quedó en libertad.
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El sábado 1 de marzo fue uno de los días más importantes en las vidas de Alejandra Avendaño (29) y Eric Solar (36). Esa tarde se casaron y se quedaron disfrutando de su fiesta hasta el final en el Club Hípico, en Santiago Por seguridad, contó Eric al diario Hoyxhoy, prefirieron irse en un taxi a las 4:30. Sin embargo todos los resguardos fueron en vano, pues un chofer ebrio y reincidente los chocó y ahora Alejandra pasa la que sería su luna de miel, en la UCI de Clínica Indisa. Todo ocurrió en la intersección de las calles Dublé Almeyda y José Pedro Alessandri, cuando según Solar, Giorgio Lathrop Rossi, se pasó una luz roja y los impactó justo por el lado donde iba la novia. Eric no se dio cuenta de nada. No escuchó un frenazo, nada. Se fue a negro. Solo recuerda haber abierto los ojos y ver a Alejandra con su vestido blanco teñido con sangre. “Yo pensé que estaba muerta”, recordó. Alejandra resultó con múltiples fracturas, el hígado y los pulmones comprometidos y una herida grave en su cabeza y cara. Pasará un mes en la clínica y su recuperación tardará al menos siete meses. Un amigo de ambos, que se fue tras ellos esa noche, le contó a Solar que "lo vio bajarse del auto (a Lathrop) e intentar cambiarse con la copiloto” -versión que es desmentida por la defensa-. Es que según informó la fiscal Evelyn Kremer, de la fiscalía local de Ñuñoa-Providencia a Hoyxhoy, el hombre no sólo conducía con al menos 0,8 gramos de alcohol en la sangre, sino que además ya había sido condenado por el mismo delito. Pese a ello, cuando fue formalizado por conducción en estado de ebriedad con resultado de lesiones graves, Lathrop quedó en libertad, sólo con firma mensual, arraigo nacional y retención de la licencia de conducir. Por eso esta vez arriesga una pena desde 541 días a tres años de presidio, una multa de hasta 12 UTM ($495.156) y la suspensión de por vida de la licencia de conducir. No se ha acercado a las víctimas. Solar, destrozado, quiere dos cosas: que su esposa se recupere y que Lathrop "pague con cárcel". Lea la noticia completa en Hoyxhoy, pinchando aquí.
Eric Solar le contó al diario Hoyxhoy que con Alejandra Avendaño prefirieron no manejar y tomar un taxi para devolverse de su fiesta de matrimonio en el Club Hípico, en Santiago. Pese a las precauciones, otro auto los impactó. El chofer ya había sido condenado por conducción en estado de ebriedad, sin embargo quedó en libertad.
El sábado 1 de marzo fue uno de los días más importantes en las vidas de Alejandra Avendaño (29) y Eric Solar (36). Esa tarde se casaron y se quedaron disfrutando de su fiesta hasta el final en el Club Hípico, en Santiago Por seguridad, contó Eric al diario Hoyxhoy, prefirieron irse en un taxi a las 4:30. Sin embargo todos los resguardos fueron en vano, pues un chofer ebrio y reincidente los chocó y ahora Alejandra pasa la que sería su luna de miel, en la UCI de Clínica Indisa. Todo ocurrió en la intersección de las calles Dublé Almeyda y José Pedro Alessandri, cuando según Solar, Giorgio Lathrop Rossi, se pasó una luz roja y los impactó justo por el lado donde iba la novia. Eric no se dio cuenta de nada. No escuchó un frenazo, nada. Se fue a negro. Solo recuerda haber abierto los ojos y ver a Alejandra con su vestido blanco teñido con sangre. “Yo pensé que estaba muerta”, recordó. Alejandra resultó con múltiples fracturas, el hígado y los pulmones comprometidos y una herida grave en su cabeza y cara. Pasará un mes en la clínica y su recuperación tardará al menos siete meses. Un amigo de ambos, que se fue tras ellos esa noche, le contó a Solar que "lo vio bajarse del auto (a Lathrop) e intentar cambiarse con la copiloto” -versión que es desmentida por la defensa-. Es que según informó la fiscal Evelyn Kremer, de la fiscalía local de Ñuñoa-Providencia a Hoyxhoy, el hombre no sólo conducía con al menos 0,8 gramos de alcohol en la sangre, sino que además ya había sido condenado por el mismo delito. Pese a ello, cuando fue formalizado por conducción en estado de ebriedad con resultado de lesiones graves, Lathrop quedó en libertad, sólo con firma mensual, arraigo nacional y retención de la licencia de conducir. Por eso esta vez arriesga una pena desde 541 días a tres años de presidio, una multa de hasta 12 UTM ($495.156) y la suspensión de por vida de la licencia de conducir. No se ha acercado a las víctimas. Solar, destrozado, quiere dos cosas: que su esposa se recupere y que Lathrop "pague con cárcel". Lea la noticia completa en Hoyxhoy, pinchando aquí.