06/05/2014 16:55:50
La entidad religiosa emitió un comunicado detallando cómo han ido conociendo los hechos de la entrega de guaguas que fueron dadas por muertas, todo esto liderado por el sacerdote Gerardo Joannon en las décadas de los 70 y 80.
Se conocieron nuevos antecedentes sobre el caso de adopciones irregulares lideradas por el sacerdote Gerardo Joannon durante las décadas de los 70’ y 80’. La congregación de los Sagrados Corazones (SS.CC.), a la que pertenece el cuestionado religioso, reconoció que supo de al menos dos casos, aunque con años de diferencia. Ante las críticas que también recibió por su proceder, la entidad religiosa emitió un comunicado titulado “Adopciones irregulares: ¿Sabíamos o no sabíamos?”, donde explica cómo han conocido los “detalles referentes a los testimonios que aparecieron en la investigación de CIPER Chile” el pasado 11 de abril. Como antecedente consideran el caso de Andrés Rillón, el que estaba en conocimiento de algunos hermanos SS.CC. desde la época del nacimiento de su hija (1983), a través de un sacerdote de nuestra congregación emparentado con él. Durante esos años no se recibió ninguna denuncia formal ni se supo de otro caso similar”. Luego de informarse que existía más de un caso, lo que levantaba la posibilidad de irregularidades en los procesos de adopción, los SS.CC. deciden “abrir una investigación previa”, con el objetivo de “profundizar el tema en cuanto pueda afectar a uno de nuestros hermanos”. A ello se sumó “como medida prudencial” lo solicitud al arzobispo de Santiago para nombrar a Fernando Vives (SS.CC.) “como administrador parroquial para reemplazar al padre Gerardo en sus funciones de párroco en La Anunciación”. En el documento se agrega que “luego de haber revisado los archivos provinciales y de consultar a los 4 superiores provinciales anteriores, dimos a conocer públicamente la información que pudimos recabar, esta es: el año 2004 aproximadamente, Andrés Rillón se comunica con el superior provincial de la época para contarle que había encontrado a su hija. Su intención era también pedir la intercesión para que el padre Gerardo ayudara a M.A.H. (iniciales con las que apareció su testimonio en el reportaje de Canal 13 la noche del 4 de mayo), a conocer el paradero de su hija o hijo, que también había sido dada por muerta o dado por muerto, en una situación similar a la vivida por Andrés Rillón. Consultado, el padre Gerardo manifestó no tener ninguna información al respecto. En ese momento se hace fe en esta respuesta, y no se considera necesario ir más allá”. El comunicado agrega que “para aproximarnos a la verdad, y reparar de alguna manera el dolor profundo que esta situación ha provocado, nos parece importante que los otros actores involucrados (familias, médicos, clínicas, abogados, etc.) asuman la parte de responsabilidad que les toca, disponiéndose a ayudar. Creemos que lo vivido en torno a estos ‘niños del silencio’, merece un esfuerzo conjunto y real que permita reconstruir y acercarse a su historia a todos aquellos que lo necesiten”. Finalmente, señalan que “como congregación creemos que hemos dado los pasos necesarios, que están a nuestro alcance para que esta situación se aclare, y aseguramos la buena disposición del padre Gerardo Joannon, SS.CC. para colaborar con la investigación en curso”. En tanto, el consejero y vocero de los SS.CC., Sandro Mancilla, aclaró en La Segunda que registros donde obtuvieron los antecedentes son “carpetas que cada uno de nosotros tiene y donde dejamos redactado acontecimientos y conversaciones importantes. Es un registro interno al cual sólo tiene acceso el superior”. Mancilla aclaró que durante la época que ocurrieron las adopciones irregulares y se manifestaron las primeras denuncias “no había claridad de cómo proceder. En estos tiempos tenemos más claridad de qué procedimientos y protocolos hay que realizar en determinadas situaciones, cosa que antes no había”. “Dependiendo de lo que resulte asumiremos la responsabilidad que nos quepa frente a esto. Hay que ver qué pasó y si hay que pedir perdón lo haremos, pero ahora es tiempo de dejar que la investigación siga su curso”, aclaró, adelantando que la investigación canónica, a cargo de David Albornoz, debería tener sus primeros resultados en próximo 31 de julio.
La entidad religiosa emitió un comunicado detallando cómo han ido conociendo los hechos de la entrega de guaguas que fueron dadas por muertas, todo esto liderado por el sacerdote Gerardo Joannon en las décadas de los 70 y 80.
Se conocieron nuevos antecedentes sobre el caso de adopciones irregulares lideradas por el sacerdote Gerardo Joannon durante las décadas de los 70’ y 80’. La congregación de los Sagrados Corazones (SS.CC.), a la que pertenece el cuestionado religioso, reconoció que supo de al menos dos casos, aunque con años de diferencia. Ante las críticas que también recibió por su proceder, la entidad religiosa emitió un comunicado titulado “Adopciones irregulares: ¿Sabíamos o no sabíamos?”, donde explica cómo han conocido los “detalles referentes a los testimonios que aparecieron en la investigación de CIPER Chile” el pasado 11 de abril. Como antecedente consideran el caso de Andrés Rillón, el que estaba en conocimiento de algunos hermanos SS.CC. desde la época del nacimiento de su hija (1983), a través de un sacerdote de nuestra congregación emparentado con él. Durante esos años no se recibió ninguna denuncia formal ni se supo de otro caso similar”. Luego de informarse que existía más de un caso, lo que levantaba la posibilidad de irregularidades en los procesos de adopción, los SS.CC. deciden “abrir una investigación previa”, con el objetivo de “profundizar el tema en cuanto pueda afectar a uno de nuestros hermanos”. A ello se sumó “como medida prudencial” lo solicitud al arzobispo de Santiago para nombrar a Fernando Vives (SS.CC.) “como administrador parroquial para reemplazar al padre Gerardo en sus funciones de párroco en La Anunciación”. En el documento se agrega que “luego de haber revisado los archivos provinciales y de consultar a los 4 superiores provinciales anteriores, dimos a conocer públicamente la información que pudimos recabar, esta es: el año 2004 aproximadamente, Andrés Rillón se comunica con el superior provincial de la época para contarle que había encontrado a su hija. Su intención era también pedir la intercesión para que el padre Gerardo ayudara a M.A.H. (iniciales con las que apareció su testimonio en el reportaje de Canal 13 la noche del 4 de mayo), a conocer el paradero de su hija o hijo, que también había sido dada por muerta o dado por muerto, en una situación similar a la vivida por Andrés Rillón. Consultado, el padre Gerardo manifestó no tener ninguna información al respecto. En ese momento se hace fe en esta respuesta, y no se considera necesario ir más allá”. El comunicado agrega que “para aproximarnos a la verdad, y reparar de alguna manera el dolor profundo que esta situación ha provocado, nos parece importante que los otros actores involucrados (familias, médicos, clínicas, abogados, etc.) asuman la parte de responsabilidad que les toca, disponiéndose a ayudar. Creemos que lo vivido en torno a estos ‘niños del silencio’, merece un esfuerzo conjunto y real que permita reconstruir y acercarse a su historia a todos aquellos que lo necesiten”. Finalmente, señalan que “como congregación creemos que hemos dado los pasos necesarios, que están a nuestro alcance para que esta situación se aclare, y aseguramos la buena disposición del padre Gerardo Joannon, SS.CC. para colaborar con la investigación en curso”. En tanto, el consejero y vocero de los SS.CC., Sandro Mancilla, aclaró en La Segunda que registros donde obtuvieron los antecedentes son “carpetas que cada uno de nosotros tiene y donde dejamos redactado acontecimientos y conversaciones importantes. Es un registro interno al cual sólo tiene acceso el superior”. Mancilla aclaró que durante la época que ocurrieron las adopciones irregulares y se manifestaron las primeras denuncias “no había claridad de cómo proceder. En estos tiempos tenemos más claridad de qué procedimientos y protocolos hay que realizar en determinadas situaciones, cosa que antes no había”. “Dependiendo de lo que resulte asumiremos la responsabilidad que nos quepa frente a esto. Hay que ver qué pasó y si hay que pedir perdón lo haremos, pero ahora es tiempo de dejar que la investigación siga su curso”, aclaró, adelantando que la investigación canónica, a cargo de David Albornoz, debería tener sus primeros resultados en próximo 31 de julio.