10/04/2013 11:43:00
Estos se tramitan ante un tribunal civil y pueden ser solicitado por uno de los cónyuges. Según cifras de Separados de Chile, entre enero y marzo de este año hubo 7.542 casos que llegaron a juicio, es decir, un alza del 44% al 45,2% si se compara con el mismo período del año pasado.
Los divorcios unilaterales o confrontacionales, es decir, aquellos que las parejas llevan a juicio, aumentaron por primera vez desde 2005. Esta separación se tramita ante un tribunal civil y puede ser solicitado por uno de los cónyuges. Según cifras de Separados de Chile, entre enero y marzo de este año hubo 7.542 casos, lo que representa un alza del 1,2% en comparación con el mismo período del año pasado cuando alcanzaron un 44%. "En los divorcios confrontacionales se observa este año un leve aumento respecto del año anterior, de un punto y medio porcentual, revirtiéndose la tendencia a la baja observada desde el 2005 en este tipo de divorcios", dijo el director de Separados, Ricardo Viteri. De acuerdo al estudio del organismo, también aumentaron las separaciones entre 2011 y lo que va del presente año en la temporada estival, la que las parejas, por el contrario, también prefieren para casarse. En 2011 ingresaron 7.972 separaciones legales; en 2012, 9.902 causas y este año sumaron 10.817. "Así las cosas, durante el periodo estival de 2013, cada dos minutos se registraba el inicio de un proceso de separación legal en tribunales de familia, sin incluir las notificaciones de cese de convivencia firmados ante el Registro Civil, las que, una vez notificados a los cónyuges, abultarían más la cifra de separados", afirmó Viteri. Hasta el 30 de marzo, un total de 16.777 procesos de separación legal se habían presentado en la entidad judicial. Del total de las demandas, un 44,5 % corresponde a divorcios de mutuo acuerdo, un 52,7% a divorcios unilaterales y un 2,8% a divorcios culposos. Estos últimos son aquellos en que a uno de los cónyuges se le acusa de incurrir en una violación grave a los deberes y obligaciones que les impone el matrimonio o con los hijos.
Estos se tramitan ante un tribunal civil y pueden ser solicitado por uno de los cónyuges. Según cifras de Separados de Chile, entre enero y marzo de este año hubo 7.542 casos que llegaron a juicio, es decir, un alza del 44% al 45,2% si se compara con el mismo período del año pasado.
Los divorcios unilaterales o confrontacionales, es decir, aquellos que las parejas llevan a juicio, aumentaron por primera vez desde 2005. Esta separación se tramita ante un tribunal civil y puede ser solicitado por uno de los cónyuges. Según cifras de Separados de Chile, entre enero y marzo de este año hubo 7.542 casos, lo que representa un alza del 1,2% en comparación con el mismo período del año pasado cuando alcanzaron un 44%. "En los divorcios confrontacionales se observa este año un leve aumento respecto del año anterior, de un punto y medio porcentual, revirtiéndose la tendencia a la baja observada desde el 2005 en este tipo de divorcios", dijo el director de Separados, Ricardo Viteri. De acuerdo al estudio del organismo, también aumentaron las separaciones entre 2011 y lo que va del presente año en la temporada estival, la que las parejas, por el contrario, también prefieren para casarse. En 2011 ingresaron 7.972 separaciones legales; en 2012, 9.902 causas y este año sumaron 10.817. "Así las cosas, durante el periodo estival de 2013, cada dos minutos se registraba el inicio de un proceso de separación legal en tribunales de familia, sin incluir las notificaciones de cese de convivencia firmados ante el Registro Civil, las que, una vez notificados a los cónyuges, abultarían más la cifra de separados", afirmó Viteri. Hasta el 30 de marzo, un total de 16.777 procesos de separación legal se habían presentado en la entidad judicial. Del total de las demandas, un 44,5 % corresponde a divorcios de mutuo acuerdo, un 52,7% a divorcios unilaterales y un 2,8% a divorcios culposos. Estos últimos son aquellos en que a uno de los cónyuges se le acusa de incurrir en una violación grave a los deberes y obligaciones que les impone el matrimonio o con los hijos.